Scott Pilgrim vs. The Universe
Novela gráfica editada en 2009
Arte e historia por Bryan Lee O’Malley
Arte adicional por Brandon Graham y Corey Lewis
Diseño por Keith Wood
Editado por Randal Jarell & Jill Beaton
Publicada por Oni Press
Bryan Lee O’Malley presenta una excelente aventura con una gran carga emocional y acción de alto octanaje, robots, planes maquiavélicos y sofisticadas fiestas: En el aniversario 24 de Scott, su romance con Ramona Flowers se pondrá a prueba cuando tengan que sortear la alternativa de llevar su relación al siguiente paso, o caer en los mismos errores de su pasado.
Tal y como se muestra en la portada, Scott Pilgrim vs. The Universe se centra en el personaje de Ramona Flowers, con Scott en papel de comedy relief enfrentando a los Hermanos Katayanagi. O’Malley retrata a este par de enemigos como si fueran sacados de la serie de Powerpuff Girls o Dexter’s Laboratory, dibujándolos al estilo de las series animadas de Cartoon Network. Algo que me pareció interesante en este tomo es que el autor se dio el tiempo de presentar brevemente parte de la diversidad cultural en Canadá con dos elementos de nuestro país, México: la Fiesta del Día de Muertos y el uso del Tequila José Cuervo.
En este quinto volumen Scott y Ramona empiezan a vivir juntos y esto empieza a afectarla. O’Malley analiza en diversas escenas lo que significa la vida en pareja cuando comparten un espacio. A diferencia de otros tomos, Scott está decidido a no darle más importancia al bagaje de Ramona, pero irónicamente es el propio pasado de Scott el que empieza a invadir a la heroína de una palpable inseguridad. El autor presenta estos temores de la protagonista a medida que avanza la narrativa: el miedo a que Scott se convierta en un ‘Ex Malvado’ y la lastime, la posibilidad de que Scott piense alguna vez en sus exes y no en ella, y sobre todo la atractiva (aunque riesgosa) disyuntiva de cambiar y dejar atrás en forma definitiva sus traumas existenciales.
El personaje de Kim Pine se revela como una parte importante dentro de la vida de Scott. Y es que a medida que avanza este relato, Kim ha sido la consciencia exterior del protagonista, haciéndole ver qué es lo que está mal y qué tiene que hacer para cambiar, muy a su manera.
O’Malley sorprende con un uso más amplio de efectos visuales (greytones y efectos digitales de luz) para retratar esta aventura. Sus trazos y líneas son mucho más precisos en el diseño de personajes. Como material adicional se presenta una galería de diversos artistas, así como también un soundtrack recomendado.
Un leitmotif a lo largo de la saga ha sido el “glow”, el aura brillante que envuelve la cabeza de Ramona. En un principio pensé que el autor intentaba representar de una forma subjetiva a los celos como un nocivo estado de ánimo, pero en el último tercio de la trama se revela aparentemente que son sus miedos y sus deseos de escapar de nuevo. Su uso en los instantes finales de la historia nos regalan un cliffhanger sumamente fuerte, dramático y efectivo, dejando todo listo para la batalla final entre Scott Pilgrim y el líder de la Liga de Exes Malvados.
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SCOTT PILGRIM circa 2009
La autor incrementa el repertorio visual y la expresión corporal del protagonista de su obra, manteniendo el estándar dejado en el tomo anterior, con los ojos y cejas grandes.
Las muecas de Scott muestran ahora sus dientes, un recurso usado a lo largo de toda la historia.
