San Diego Comic-Con International 2018
San Diego Convention Center
Julio 17–21
“…a giant plastic humane mouse trap with two airholes in, in the middle of summer.”
— Warren Ellis.
La experiencia del año pasado fue importante para disfrutar un poco más la edición 2018 de la Comic-Con de San Diego, aunque cabe señalar que los eventos de Hall H no tuvieron el mismo impacto que los de 2017—el tráiler de Avengers: Infinity War puso a todos de cabeza—siendo Warner Studios quien esta vez lanzó la casa por la ventana con una seguidilla de páneles y presentaciones especiales. El momento más memorable fue sin duda la despedida de Andrew Lincoln de la serie de TV de “The Walking Dead” (tras 8 años como protagonista), y el pánel de la cinta “Halloween” con la primera actriz Jamie Lee Curtis, el director David Gordon Green y el productor Jason Blum.
Además de esto hubo pláticas con el reparto de cintas como “Glass”, “Venom”, “Fantastic Beasts 2”, “Shazam”, “Aquaman”, “Spider-Man: Into the Spider-Verse” y “Bumblebee”, siendo el luchador y actor John Cena la personalidad más asediada por los fans.
Es importante decir que el haber ido previamente al evento no te garantiza tu presencia en la siguiente edición: sigues haciendo fila virtual y el trámite de los lugares puede tardar más de una hora. En las dos ocasiones el “Preview Night” del miércoles—que presenta material exclusivo para los medios especializados—siempre estuvo agotado al momento de entrar a ordenar los boletos. A diferencia del 2017 esta vez pude conseguir jueves, viernes, sábado y domingo. De igual forma el conseguir hospedaje sigue siendo lo más complicado, ya que puedes pasar cada día en hoteles distintos debido a la alta ocupación que se da durante el mes de julio en San Diego. Opciones existen como salirte del área metropolitana, rentar vía Airbnb (aunque su costo es muy elevado), o bien moverte una y otra vez por la frontera de Tijuana y quedarte en México a pasar la noche, aunque esto implica llegar muy temprano a la aduana para evitar filas inmensas y desplazarte vía metro al centro de la ciudad.
Mi estancia en 2018 fue más relajada que la anterior, ya que decidí no asistir a la mayoría de los páneles y pasar más tiempo buscando comics para seguir completando mi checklist—aunque el domingo el Hall H tuvo el grueso de eventos por parte de Warner, por lo que tuve que hacer la tradicional fila de varios días para conseguir la pulsera de acceso. El día sábado hubo una sección de 45 minutos en donde se mostraron tráilers de películas tales como Mandy, un teaser de la tercera temporada de Stranger Things y avances de series como Castle Rock.
Una de las cosas más curiosas dentro del evento es que para conseguir parafernalia exclusiva de la Comic-Con tienes que hacer una fila especial al momento de recibir tus pases, en donde dependiendo de lo que quieras te dan unos boletitos de colores para que vayas a los booths a hacer (otra) fila y tener derecho a adquirir ya sean litografías, posters, figuras coleccionables, etc. En mi caso preferí ir a aquellos que no requerían boletito: en el stand de Bill Sienkiewicz pude adquirir un sketchbook de “New Mutants”, y en el de Alex Ross pude comprar un litho de Wonder Woman.
Las amenidades ubicadas en la periferia del Centro de Convenciones no tuvieron parangón, desde meet & greets, parques temáticos y promocionales variados. El stand de Image Comics estuvo de plácemes promocionando la serie de TV Deadly Class, la cual tuvo su pánel con el reparto en uno de los hoteles aledaños. En la compra de cualquier TPB se regalaba una copia de Deadly Class #1 con portada conmemorativa.
Aún y cuando a mi parecer sus “días de gloria” han quedado atrás, el recorrer el inmenso Convention Center, empaparse de su atmósfera sumamente divertida y perderse entre sus innumerables detalles no tiene comparación—aunque eventos equiparables a esta escala serían sin duda el C2E2 en Chicago, la New York Comic Con, el Festival de la Historieta en Angoulême y el Salón Internacional del Comic en Barcelona. Habiendo saciado mi curiosidad con la Comic-Con, puedo decir que es una experiencia no solamente inolvidable sino una asignatura obligada para cualquier fan de la cultura pop.