Tras la negativa de UEFA y FIFA a la “Superliga”, el presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, sentenció en una junta de socios: “Igual hay que recordarle a la UEFA quién es el Real Madrid”.
Pues bien, el club blanco en el periplo 2021-2022 se enfrentó a una pléyade de equipos propios de una compleja geopolítica futbolera: Inter (de capital chino), Shakhtar (cuya región fue abatida por la guerra Rusia/Ucrania) y Sheriff (de la región no reconocida de Transnistria) en fase de grupos; una bochornosa pifia en el sorteo le pone vs. PSG (de propiedad catarí), posteriormente al Chelsea (capital ruso), Manchester City (Emiratos) y Liverpool (USA), a quienes derrotó en electrizantes encuentros a pesar de no ser favorito.
Liderados por Karim Benzema y un prodigioso Courtois en la final, el Madrid demostró que sigue siendo el club número uno del mundo.